El nuevo filtro de diligencia debida no es solo tecnología, sino también dominio de la IA.
Los inversores no preguntan si usas IA. Preguntan cómo.
Hace un año, mencionar la IA en tu presentación podría haberte ganado algunos reconocimientos adicionales. Hoy, si no la mencionas, estás atrasado. El inversor de 2025 no solo siente curiosidad por tu uso de la IA; espera que esté integrada en tu modelo operativo, no que sea una característica adicional.
Tanto si estás recaudando una ronda semilla como si estás planeando tu ronda de financiación de Serie B, la IA ya forma parte de la diligencia debida básica para la mayoría de los inversores de capital riesgo. No se trata de publicidad exagerada. Se trata de supervivencia y apalancamiento.
1. La IA es la nueva «nube»: invisible, esencial y esperada
Piense en cómo la computación en la nube pasó de ser una palabra de moda a una utilidad secundaria. Lo mismo ocurre con la IA.
Un informe reciente de Sequoia Capital señaló que más del 70 % de las hojas de términos de las etapas iniciales en el primer trimestre de 2025 incluían preguntas sobre la integración de la IA, independientemente del sector. Esto no se aplica solo a las startups que priorizan la IA. También se aplica a las empresas B2B SaaS, de consumo, logística, fintech: a todas.
Los fundadores que tratan la IA como una capa opcional o una optimización posterior al lanzamiento no entienden la esencia. Los inversores buscan defensa, eficiencia y escalabilidad. La IA facilita las tres cosas, si está integrada en el producto, las operaciones o el modelo de crecimiento.
Conclusión: No se limite a decir «usamos IA». Demuestre cómo le brinda una ventaja estructural: una incorporación más rápida, un CAC más bajo, precios dinámicos, una mejor predicción del valor de vida del cliente (LTV), etc.
2. Los fundadores deben demostrar conocimientos de IA, no solo su uso
Ya no basta con decir que «usan ChatGPT» o que desarrollan «con las API de OpenAI». El fundador nativo de IA comprende las ventajas y desventajas: coste por inferencia, latencia vs. precisión, cuándo ajustar vs. acelerar la ingeniería. Los inversores no necesitan que seas ingeniero de aprendizaje automático, pero esperan que domines el lenguaje de la economía de la IA.
Por ejemplo, Quickers no solo ofrece soluciones de IA, sino que ayuda a las startups a diseñarlas de forma inteligente. Sus servicios de consultoría de IA generativa incluyen pipelines personalizados, modelos optimizados para cada dominio y orientación a nivel de infraestructura. Ese nivel de profundidad técnica genera confianza en una propuesta.
Conclusión: Haz que tu historia de IA se centre en decisiones y diseño, no solo en herramientas. Incluye métricas: coste por consulta de usuario, ciclos de actualización de modelos, tiempo ahorrado en operaciones.
3. La eficiencia impulsada por IA se está convirtiendo en el motor de tu margen
Hablemos del flujo de caja. Las startups suelen sobrevivir o morir en función de la extensión de la pista, y aquí es donde la IA no es solo una característica, sino un salvavidas.
Una startup que utiliza IA para la atención al cliente puede reducir la plantilla y, al mismo tiempo, mejorar la capacidad de respuesta. Las herramientas de capacitación de ventas basadas en IA pueden generar automáticamente clientes potenciales de ICP. Plataformas como Quickers ayudan a las startups a aplicar estas optimizaciones en todos los departamentos, desde procesos de contratación mejorados con IA hasta flujos de trabajo inteligentes para el desarrollo de productos.
3. Los inversores de capital riesgo apuestan por los sistemas, no solo por las funciones
Muchas presentaciones aún tratan la IA como una simple presentación de funciones. «Tenemos un chatbot». «Usamos IA para generar informes». Eso no es una ventaja competitiva. Es un widget.
Las mejores presentaciones presentan la IA como una ventaja a nivel de sistemas. Piense en:
Conjuntos de datos propietarios
Flujos de trabajo mejorados con IA
Ciclos de aprendizaje que mejoran con la escala
Inteligencia integrada en UX, operaciones y ventas
Aquí es donde se refleja el ADN de ingeniería de Quickers. Sus equipos de IA y software no solo crean funciones, sino que codiseñan sistemas que aprenden, se adaptan y se diferencian con el uso.
Conclusión: Replantee la IA en su presentación, desde lo que hace hasta cómo se integra. Muestre el ciclo de retroalimentación.
5. El listón es más alto, pero las herramientas son más accesibles
¿La buena noticia? Ya no necesitas un equipo de ML de 20 personas para lanzar algo inteligente. Gracias a plataformas como Quickers Venture, puedes conectarte a aceleradores de IA prediseñados, integrar modelos específicos de dominio y probar casos de uso en cuestión de semanas.
¿La mala noticia? Al ser más sencillo, los inversores esperan mayor refinamiento, mayor reflexión y mayor sofisticación con mayor antelación.
Si tu presentación no refleja una capa de IA creíble y bien pensada, prepárate para recibir presiones. Peor aún, puede que ni siquiera quedes entre los primeros en la lista de candidatos.
Conclusión: Aprovecha la potencia de fuego donde sea necesario, pero asume el pensamiento estratégico. La IA ya no es I+D, es GTM.
Reflexión final: La IA es una prueba de alfabetización: aprovéchala o no la tendrás.
No necesitas renovar tu imagen como una startup de IA. Pero sí necesitas demostrar dominio de la IA, ya que los inversores ahora la ven como un indicador de tu perspicacia, escalabilidad y preparación para el futuro.
No se trata de perseguir tendencias. Se trata de construir con apalancamiento desde el primer día. Y en 2025, apalancamiento significa IA en los lugares adecuados, alineada con tu misión, no una distracción.
Si necesitas ayuda para implementar la IA, desde tu presentación hasta tu capa de datos, Quickers no es solo un proveedor de servicios. Es un cofundador técnico que te acompaña.
Sin rodeos. Sin trucos. Solo señales.
Ahora, haz que tu presentación prediga tu futuro, de forma inteligente.